La presidenta Claudia Sheinbaum desmintió las versiones sobre un posible aumento significativo en los precios de la gasolina y el diésel, aclarando que cualquier ajuste en el IEPS está ligado únicamente a la inflación, que cerrará este año en 4.3%. Subrayó que esta regulación proviene de una ley aprobada durante administraciones anteriores.
En la última conferencia matutina del año, Sheinbaum destacó que ha instruido a Luz Elena González, titular de la Secretaría de Energía, para reunirse con concesionarios de gasolineras y analizar las razones detrás de los precios elevados en ciertas zonas del país. En algunos lugares, señaló, el costo de la gasolina regular llega a los 26 pesos por litro, lo que calificó como “totalmente fuera de norma”.
Si bien desde 2013 no existen precios máximos debido a la reforma energética, Sheinbaum reiteró su compromiso de evitar alzas injustificadas y combatir la especulación. Además, Pemex y Sener trabajan en un análisis exhaustivo para regular los precios en beneficio de los consumidores.
La mandataria aseguró que su gobierno mantiene el compromiso de que los precios de los combustibles no aumenten en términos reales, enfatizando que cualquier ajuste será únicamente proporcional a la inflación, sin exceder lo establecido por la ley.
