La Basílica de Guadalupe se convirtió nuevamente en el epicentro de la fe y la devoción en México, al recibir a 11.5 millones de fieles durante el 493 aniversario de la aparición de la Virgen en el Tepeyac. Ubicado en la alcaldía Gustavo A. Madero, este recinto sagrado reunió a creyentes de todo el país y del extranjero que acudieron para venerar a la Patrona de América Latina.
Una muestra de fe masiva y organizada
Entre las 6:00 horas del 6 de diciembre y las 6:06 horas del 12 de diciembre, la celebración reunió a millones de peregrinos, según cifras oficiales compartidas por Clara Brugada, jefa de Gobierno de la Ciudad de México. Durante el evento, se atendieron 1,767 emergencias médicas por agotamiento, deshidratación y lesiones menores, además de realizar dos traslados hospitalarios. También se gestionaron 41 reportes de personas extraviadas, de las cuales 40 fueron localizadas gracias al trabajo coordinado entre autoridades y voluntarios.
Un legado que une generaciones
Esta multitudinaria peregrinación reafirma la relevancia espiritual y cultural de la Virgen de Guadalupe, cuyo mensaje trasciende fronteras y generaciones. Más que un evento religioso, esta manifestación de fe refleja la fuerza de una tradición viva que une a millones de personas bajo un símbolo de esperanza, unidad y devoción compartida.