El secretario general de Morena, Omar Holguín Franco, manifestó que en relación a las recientes declaraciones del alcalde Bonilla es preciso señalar que tanto el empleo de la violencia, como sucedió hace días con su empleada municipal Reyna Arellano, como la soltura de la lengua para usar un vocabulario lépero y vulgar se deben al gran temor y preocupación por el imparable avance de Morena en la Capital y en todo el estado.
“No cabe duda que Bonilla le ha aprendido muy bien dos cosas a su mentora: el vocabulario de carretonero y la rapacidad para hacer grandes negocios a costillas de los chihuahuenses”, aseveró el líder morenista al poner como ejemplo las luminarias, el Relleno Sanitario y la obra “La Golondrina y su Príncipe”.
Detalló Holguín Franco que en vez de comportarse como gobernante de los chihuahuenses y buscar la coordinación y apoyo de la Federación para sacar adelante a la ciudad, Bonilla actúa como una marioneta de la gobernadora, copiando vilmente su soez conducta.
En ese sentido el secretario general de Morena realizó los siguientes cuestionamientos: ¿Qué está haciendo para resolver el alza en la incidencia delictiva y detener la ola de ejecuciones?, ¿Qué programa ha aplicado para prevenir y combatir el preocupante problema de las adicciones?, ¿Qué opina sobre el tremendo déficit en obra pública que se ha registrado en su administración?, ¿Cuántos programas sociales implementa para apoyar a los chihuahuenses más humildes?, ¿Cuánto invierte para dotar de servicios públicos a los miles de chihuahuenses que carecen de ellos? y en general ¿Qué hace para resolver los problemas de la ciudad?
“El que se hace “guaje” es él, no el gobierno federal”, concluyó Omar Holguín.
Crédito: RÁFAGA CHIHUAHUA