De acuerdo a datos expuestos por el Observatorio Ciudadano del Fideicomiso para la Competitividad y Seguridad Ciudadana (FICOSEC) de Chihuahua con información de la Fiscalía General del Estado (FGE), en el 2023 se registró una tasa de impunidad del 95.1% en el delito de violencia familiar, lo cual se reflejó en un considerable incremento progresivo durante los últimos años, desde una tasa del 8.6% en 2017.
Las carpetas de investigación que se abrieron en dicho año por violencia familiar fueron 3,530, de las cuales resultaron únicamente 7 sentencias condenatorias que representa el 0.2% del total, esto sin contar otro tipo de determinaciones que, en conjunto, representaron el 2.7%: abstención a investigar, 0.7% (25 casos); no ejercicio de la acción penal, 0.5% (18 casos); Archivo temporal, 1.0% (37 casos); otra determinación, 0.5% (18 casos).
Los asuntos judicializados de las carpetas, fueron 568, es decir, el 16.1%. No obstante, quedaron marcadas en “estado de investigación”, 2,751, o sea, el 77.9%.
Hubo 95 suspensiones del proceso, lo cual representó el 2.7%.
Respecto al sobreseimiento, decisión que puede tomar el juez cuando el hecho no se cometió, no constituye delito o el imputado es inocente (entre otras), hubo 10 (0.3%).
La tasa de asuntos terminados alcanzó solamente el 4.9% durante dicho año, mientras que no se registró sentencia absolutoria alguna.
Crédito: LA PARADOJA