
Un pequeño avión privado se estrelló la madrugada de este lunes en un barrio residencial de San Diego, California, dejando varias personas fallecidas y daños materiales considerables, informaron autoridades locales. El accidente ocurrió alrededor de las 03:45 horas, cerca del Aeropuerto Ejecutivo Montgomery-Gibbs.
De acuerdo con la Administración Federal de Aviación (FAA), la aeronave, registrada en el Medio Oeste de Estados Unidos, pudo haber transportado entre ocho y diez personas, incluido el piloto. Hasta el momento, no se ha confirmado el número exacto de pasajeros ni de víctimas fatales.
“Creemos que hay varias víctimas mortales”, declaró Dan Eddy, del Departamento de Bomberos de San Diego. El funcionario indicó que, hasta ahora, las víctimas fatales estarían a bordo del avión, y no entre los ocupantes de las viviendas o vehículos alcanzados por el impacto.
El siniestro provocó daños en al menos diez casas, varios automóviles fueron calcinados y el suelo quedó cubierto de escombros. Además, una línea eléctrica resultó afectada, lo que podría estar relacionado con los incendios registrados en el lugar, según las primeras investigaciones.
Durante una conferencia de prensa, el alcalde de San Diego, Todd Gloria, expresó su apoyo a las familias afectadas. “Esta es una tragedia y nos solidarizamos con los afectados. Seguiremos estando presentes (…) y nos aseguraremos de que las familias afectadas, que no tienen acceso a sus hogares, reciban el apoyo adecuado hasta que puedan regresar”.
El capitán Robert Heely, comandante de la Base Naval de San Diego, explicó que el área impactada es “una de las zonas residenciales militares más grandes del mundo” y confirmó que “muchas familias de militares se vieron afectadas”.
En redes sociales, la policía local informó que se evacuaron tres calles cercanas al sitio del accidente. Las autoridades pidieron a los residentes no acercarse a la zona y contactar a los servicios de emergencia si detectan escombros o perciben olor a queroseno.
Algunos habitantes sufrieron quemaduras en los pies por caminar entre restos incandescentes, pero ninguno requirió hospitalización, pues fueron atendidos en el lugar.
La FAA y otras agencias correspondientes continúan las investigaciones para esclarecer las causas del accidente.
