La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que su gobierno está preparado para enfrentar cualquier escenario en caso de que Donald Trump imponga aranceles a México.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum enfatizó que su administración cuenta con un plan A, B y C ante cualquier decisión que tome el gobierno de Estados Unidos. Además, destacó que se mantiene un diálogo constante con las autoridades estadounidenses para abordar la situación sin comprometer la soberanía nacional.
Acompañada por el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, la mandataria subrayó que la posible imposición de aranceles afectaría gravemente a la economía estadounidense. Ebrard explicó que un arancel del 25 % encarecería de inmediato productos esenciales para los consumidores en EE.UU., como autos, computadoras, televisores y electrodomésticos, generando presiones inflacionarias y afectando el acceso a bienes de primera necesidad.
México, principal proveedor de automóviles y autopartes en EE.UU., representa una parte clave de la industria manufacturera. De imponerse los aranceles, 12 millones de familias estadounidenses tendrían que pagar 10 mil 427 millones de dólares adicionales por estos productos. Asimismo, el aumento en el costo de computadoras afectaría a 40 millones de familias, con un impacto estimado de 7 mil 104 millones de dólares.
El alza en los aranceles también impactaría directamente la compra de pantallas y otros dispositivos electrónicos, encareciendo el mercado en más de 2 mil 397 millones de dólares y afectando a 32 millones de hogares en EE.UU.
Además, los estadounidenses enfrentarían aumentos en los precios de frutas, verduras, carne y cerveza, con los estados de California, Texas, Florida y Arizona entre los más afectados.
Sheinbaum reiteró que el gobierno de México continuará apostando por el diálogo para evitar afectaciones económicas y proteger los intereses del país.
