Este lunes se llevaron a cabo actos conmemorativos por el 80 aniversario de la liberación de Auschwitz, el campo de exterminio nazi ubicado en Polonia. La ceremonia reunió a alrededor de 50 sobrevivientes y a líderes mundiales, destacando la importancia de mantener viva la memoria de las víctimas del Holocausto.
La jornada inició con una ofrenda floral en el Muro de la Muerte del campo, en la que participaron el presidente polaco Andrzej Duda y algunos sobrevivientes. Más tarde, frente a los portones de Auschwitz II-Birkenau, se realizó un acto central con la presencia de figuras como el rey Carlos III de Reino Unido, el presidente francés Emmanuel Macron, el canciller alemán Olaf Scholz y el presidente alemán Frank-Walter Steinmeier.
El evento destacó por su enfoque en los testimonios de los sobrevivientes, dejando de lado los discursos políticos. Pawel Sawicki, portavoz del Museo de Auschwitz, subrayó que el mensaje de quienes vivieron esta tragedia es crucial, especialmente ante el aumento del antisemitismo en el mundo y el temor de que la historia pueda repetirse.
Los organizadores señalaron que esta conmemoración será probablemente la última en contar con un grupo numeroso de sobrevivientes, dado el paso del tiempo. “Todos sabemos que en 10 años no será posible tener un grupo grande para el 90 aniversario”, afirmaron.
En su intervención, el canciller alemán Olaf Scholz reiteró el compromiso de su país con la memoria histórica y condenó las atrocidades del Holocausto: “Más de un millón de personas con sueños y esperanzas fueron asesinadas en Auschwitz por alemanes. Nunca los olvidaremos. Ni hoy ni mañana”.
