En un evento celebrado en Chinantla, Puebla, la presidenta Claudia Sheinbaum reiteró su compromiso con la protección de los mexicanos que residen en Estados Unidos tras la reciente toma de posesión de Donald Trump como presidente. Destacó la importancia de los más de 30 millones de migrantes mexicanos en el vecino país, quienes en 2024 enviaron 65,000 millones de dólares en remesas, fundamentales para las economías de ambos países.
Durante la entrega de Tarjetas de Pensiones de Bienestar, Sheinbaum subrayó que los derechos sociales impulsados desde la Cuarta Transformación ahora están garantizados por la Constitución y aseguró que se ampliarán para beneficiar a sectores vulnerables, como mujeres mayores de 60 años, estudiantes de educación básica pública y adultos mayores, a quienes se les llevará atención médica a domicilio. Además, criticó el modelo neoliberal de gobiernos anteriores por privatizar recursos que eran propiedad del pueblo.
La presidenta enfatizó: “El pueblo de México tiene derechos, no todo es mercancía (…) En 2018 se acabó el periodo neoliberal. Por el bien de todos, primero los pobres; no puede haber gobierno rico con pueblo pobre; y Con el pueblo todo, y sin el pueblo nada”.
Respaldo total a los migrantes mexicanos
Desde Puebla, estado con un alto número de migrantes en Estados Unidos, Sheinbaum recordó que 7 de cada 10 trabajadores del campo en ese país son mexicanos y subrayó que los consulados y la Embajada están trabajando para brindar protección consular y asistencia jurídica. Declaró tajantemente que “México no es colonia ni protectorado de nadie” y destacó la contribución económica y cultural de los connacionales, afirmando que “sin los mixtecos, ¿qué sería de Nueva York?”.
La secretaria del Bienestar, Ariadna Montiel Reyes, aseguró que el Gobierno federal está preparado para apoyar a los migrantes que enfrenten deportaciones masivas bajo el nuevo mandato de Trump, y reconoció su esfuerzo por sostener a sus familias y comunidades en México. Montiel también destacó la importancia de eventos comunitarios como la feria del Padre Jesús de Chinantla, que permite la reunión de familias migrantes.