La película Emilia Pérez ha causado un gran debate en México desde su estreno, generando críticas que van desde el rechazo total hasta la reflexión sobre el cine como medio de expresión. El director Jacques Audiard, ante las acusaciones de trivializar temas sensibles como la violencia y la desaparición forzada, ha ofrecido disculpas públicas, asegurando que su intención nunca fue ofender.
En una conferencia de prensa previa a la presentación de la película en México, Audiard explicó: “La ópera no es realista, pero entiendo que haya elementos en la película que puedan resultar escandalosos para algunos. Les pido perdón a los mexicanos si se sintieron ofendidos”. El director subrayó que Emilia Pérez no busca ser un reflejo exacto de la realidad, sino un experimento artístico que plantea cuestionamientos universales.
La película, protagonizada por Karla Sofía Gascón, combina ópera y cine de ficción para abordar la violencia en México. Sin embargo, su enfoque estilizado y su uso de metáforas artísticas han sido criticados por muchos como una banalización de problemas serios. Audiard defendió su obra argumentando que “el cine no responde, cuestiona”, aunque reconoció que tal vez no presentó las preguntas de la manera adecuada.
El rechazo hacia la película no solo se ha manifestado en redes sociales, sino también por activistas como Artemisa Belmonte, quien lanzó una petición en Change.org exigiendo la retirada de la cinta. “La película convierte en un espectáculo lo que para nosotros es una tragedia diaria”, afirmó. Además, figuras públicas como Eugenio Derbez también criticaron el enfoque de la película y la falta de autenticidad cultural en algunos aspectos, como el español de Selena Gómez, quien participa en el filme.
A pesar de las disculpas de Audiard, la controversia ha destacado las tensiones que surgen cuando creadores internacionales abordan realidades locales complejas sin un entendimiento profundo de los contextos involucrados. Este caso plantea importantes interrogantes sobre la responsabilidad de los artistas al tratar temas sensibles y la necesidad de un enfoque respetuoso hacia las culturas que representan.