Para la elección presidencial de 2024, Twitter se coloca como la red social predilecta de los grupos políticos para implementar campañas para afectar a sus contrincantes. Algunas tienen bien identificados a quienes las orquestan, pero otras no. En el caso de la campaña de las “narcoetiquetas” que se buscó vender como “orgánica”, hay rastros que apuntan al autor: la derecha.
La campaña en redes sociales en contra del Presidente Andrés Manuel López Obrador acumula 10 millones de tuits en tan solo tres meses, de acuerdo con los datos de Pandemia Digital. La etiqueta #NarcoPresidente aparece siempre en los primeros primeros lugares de tendencia.
Como documentaron Julián Macías y Alberto Escorcia, expertos en el análisis de redes sociales y desinformación, con el paso de los días, las cuentas encargadas de impulsar la campaña de #NarcoPresidente empezó a empatarse con la campaña de apoyo a Xóchitl Gálvez, la candidata del PRI, PAN y PRD.
Esto a pesar de que nadie en la alianza se ha adjudicado la campaña de #NarcoPresidente. Sin embargo, dejaron un rastro identificado en otras campañas implementadas por la derecha en otros países como Estados Unidos y España.
La aparición de cientos de pornobots se hizo evidente en cuentas de periodistas, políticos y analistas principalmente. Se trata de respuestas que llegan a tuits sobre política con mensajes que invitan a visitar el perfil para encontrar pornografía.
De acuerdo con ambos expertos, estas cuentas que en muchos casos usurpan identidades, es decir, las fotografías que utilizan son de otras personas, están activas en las campañas de #NarcoPresidente y todas sus variantes; aparecen en tuits contra la candidata Claudia Sheinbaum y participan en el impulso de los hashtags de #XóchitlPresidenta2024.
La pornografía en redes sociales no es nueva. Representa uno de los mayores tráficos para la mayoría de los sitios aún cuando tengan restricciones para la protección de menores de edad aunque en el caso de Twitter no hay tal.
Julián Macías Tovar, activista contra la desinformación digital y fundador de Pandemia Digital, explicó la pornografía en redes se utiliza para llevar tráfico, es decir, visitas, o para generar interés a incautos.
“Aunque hay restricciones a ese tipo de contenido en redes, en Twitter no, e incluso el algoritmo potencia el tráfico hacia esas cuentas que pueden ser estafas o de negocios privados. […] En España está vinculado el uso de pornobots a las estrategias de desinformación de la ultraderecha. Son cuentas que tienen contenido pornográfico pero a la vez tienen participación en los hashtags de campañas de desinformación”, comentó en entrevista.
El experto, quien se ha adentrado en los millones de tuits con el hashtag #NarcoPresidetnte y sus variantes, detectó que las cuentas que operan ese ataque contra el Presidente López Obrador sí operan también promoviendo el contenido pornográfico o erótico.
“Analizando hasta los tuits con error con un ‘botnet’ se habla de unas 50 o 100 cuentas que tienen fotografías de modelos eróticas –que incluso podrían denunciarse por usurpación de identidad– y todas tienen exactamente la misma actividad de otras 300 o 400 cuentas de bots sin contenido erótico […] hay ciertos hashtags o palabras que usaban todas al mismo tiempo y hacen hashtags favorables a Xóchitl o usan las narcoetiquetas o difunden las encuestas falsas de Massive Caller. Todas manejan el mismo contenido”, sostuvo el analista.
La estrategia está probada, los análisis de Pandemia Digital han encontrado las mismas tácticas en otros países. Una de las razones es porque la pornografía tiene un público muy amplio y la actividad, que es frenética, mantiene a la gente en las redes.
En el caso de México, las cuentas de pornobots, además de inflar los hashstags, buscan atraer usuarios que no sean seguidores de Xóchitl; es decir, estas cuentas que llaman la atención atraen gente con contenido erótico y de repente meten el contenido político.
Lo mismo ocurrió, asegura Macías, en campañas de Donald Trump en Estados Unidos y Vox lo hizo en España.
Otra posibilidad es que sí se trate de cuentas que tienen su negocio con el contenido erótico –como OnlyFans– pero que reciban pagos por potenciar o subir cierto contenido.
Y otro fenómeno que también implica fotografías aunque no eróticas, son las cuentas que tienen en su foto de perfil una imagen de alguna modelo extranjera usurpando su identidad o en otros casos con imágenes creadas con Inteligencia Artificial. Esas cuentas son “trollstars” y potencian los hashtags que se estén trabajando en el momento.
“Usar fotos de actrices es una estrategia para creer que es esa persona y atraer personas”, agregó Macías quien puso como ejemplo la cuenta de “Linda Sofía”, que utiliza imágenes de una modelo rusa y su contenido es por completo político y de ataque, además de estar ligada a la campaña de #NarcoPresidente.
Además está ubicada como una cuenta potencializadora, lo que significa que los tuits que ella publique son amplificados por cientos de cuentas de bots, con lo que se garantiza el funcionamiento de la tendencia.
Crédito: SINEMBARGO
