El gobierno del presidente de Argentina, Javier Milei, calificó como un intento de socavar su gestión la decisión del Senado de rechazar por mayoría un amplio decreto de desregulación de la economía.
La Oficina del Presidente dijo en un comunicado que el rechazo votado en la Cámara Alta del decreto de necesidad y urgencia (DNU) firmado por Milei en diciembre también atenta contra la convocatoria lanzada por el mandatario a los gobernadores para firmar el 25 de mayo un nuevo “pacto fundacional” para Argentina, con una decena de compromisos económicos y políticos.
“Resulta imposible interpretar esta decisión de otra manera que como un intento de socavar el Pacto de Mayo, el gobierno nacional y el cambio elegido por los argentinos”, señala el comunicado.
La Cámara Alta rechazó el “megadecreto” por 42 votos en contra del instrumento firmado por Milei, 25 a favor y cuatro abstenciones, y ahora será girado para su tratamiento a la Cámara de Diputados, por lo que de momento el decreto sigue vigente.
Si la Cámara Baja también lo rechaza, quedará anulado.
En la votación en el Senado, el rechazo vino del bloque peronista, legisladores de fuerzas provinciales y algunos miembros de la Unión Cívica Radical.
“El presidente de la Nación desea destacar la labor de los senadores nacionales de La Libertad Avanza (oficialismo), del Pro, y especialmente de la mayoría absoluta de los senadores de la Unión Cívica Radical, quienes han dado la lucha en defensa de la libertad de los argentinos, a pesar de conocer de antemano el resultado negativo”, indicó la Oficina del Presidente.
El DNU 70/2023 de “bases para la reconstrucción de la economía argentina” fue firmado por Milei el 21 de diciembre, pocos días después de asumir la presidencia argentina.
Entre otras cosas, el decreto, que junto con el proyecto de la denominada “ley ómnibus”, conforma el corazón de las ambiciosas reformas pretendidas por Milei, deroga unas 80 leyes y modifica otras 300 normas.
El instrumento es rechazado por buena parte de la oposición política, no sólo en el parlamento, sino también entre los gobernadores de provincias, todos opositores.
La sesión del jueves fue convocada por la titular del Senado y vicepresidenta argentina, Victoria Villarruel, después de que senadores opositores pidieran tratar el DNU en el pleno.
Hubo críticas puertas adentro del oficialismo por la decisión de Villarruel de convocar a la sesión en vez de esquivar la maniobra opositora.
En un mensaje grabado que difundió en redes sociales tras la votación, Villarruel aseveró que su “compromiso con Milei es inclaudicable” y que ha trabajado con él “espalda con espalda, a pesar de los incansables intentos por dividirnos”.
Con todo, aclaró que “el Senado es la casa de las provincias y un poder independiente” y se diferenció de las prácticas que tuvo Cristina Fernández mientras comandó la Cámara Alta entre 2019 y diciembre pasado.
“Yo no me voy a convertir en Cristina Fernández de Kirchner. No me voy a convertir en aquello que vinimos a cambiar. No hay gobierno sin institucionalidad”, afirmó.
Crédito: LATINUS