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SALUD
La semana pasada, una jueza federal de Washington desestimó la iniciativa que prohibía a los extranjeros con visa de turista en EE.UU. vender su plasma.
En julio de 2018, Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés), emitió una prohibición para que los turistas extranjeros no pudieran vender su plasma en Estados Unidos por considerarlo como “una violación a los términos de vida”.
Con la prohibición desechada, ahora los mexicanos con visa de turista B-1 y B-2 pueden volver a cruzar la frontera para vender plasma, lo que en muchos casos representa la oportunidad de mejorar la economía familiar. Además, compañías extranjeras como CSL Plasma se benefician de esto al tener una cantidad considerable de vendedores que acuden semana tras semana para completar sus ingresos.
“Puedes ir dos veces por semana, en esta ocasión, por ser mi primera vez, fueron cien dólares, la siguiente vez te dan un bono de diez, para que sean 110 y si sigues yendo en el mes, dependiendo de algunas metas, hay unos pagos de 80 y otros de cien, si completas dos veces durante cuatro semanas, son cerca de 650”, señaló Roberto Gómez, cliente de CSL Plasma.